“El buen calabazal en marzo lo has de sembrar”
Eso dice el refrán, y ¡cómo nos lo creemos!, que en nuestro huerto, ya estamos preparando el terreno: limpiamos, preparamos, abonamos y sembramos.
Y en las clases, ¡ los semilleros están listos!
Hemos decidido convertirnos un poco en investigadores, y como buenos científicos no nos quedamos
convencidos de lo que los libros nos dicen y hemos buscado la forma de ver cómo y en cuánto tiempo son capaces las semillas de germinar.
Ahora sabemos lo que es una semilla, cómo son las raíces, cómo empieza a crecer el tallo y cómo esas dos partes de la semilla se convierten en cotiledones, que no hojas, y empiezan a dar vida a la nueva planta.
Hemos aprendido lo que es una “cama caliente” construir “invernaderos de lo más sencillo” y aprovechar el calorcillo del radiador para conseguir que las semillitas nos garanticen su germinación.
¿A qué son chulos los invernaderos que hemos creado? |